viernes, 28 de febrero de 2014

ELISEU HUERTAS Un Chien Catalan



La primera vez que supe de Eliseu Huertas fue tras un viaje de Raúl Guber, por entonces en Xeerox a Londres para asistir a un concierto de Throbbing Gristle, al regreso me narraba que no sabía si le había sorprendido aún más que el propio concierto haber conocido a un catalán que ante al asalto sónico del cuarteto comentaba que el pensaba ir a un grado más extremo pretendiendo grabar el sonido de su potente motocicleta. Años más tarde en 1994, su proyecto se materializó en un compact como Vagina Dentata Organ y con el título de Un Chien Catalan, un disco que su editor Jordi Valls y alma mater de VDO describía como un encuentro de surrealismo, metafísica y mecánica a través de los paisajes dalinianos de Cadaqués, Cap de Creus y Port Lligat lugar este último que tanto el como su hermano Toni, tristemente recien fallecido, solían visitar para ver al pintor y compartir pasiones como Alice Cooper con quien Dalí finalmente colaboraría.

Poco después de su publicación en 1994, Eliseu fue invitado a presentar su disco en medio de un concierto rave organizado por los programadores habituales de La Sala del Cel de Girona en una fantástica fábrica modernista de Celrá, para ello decidió subir la Harley Davidson al escenario y me pidió que en una especie de simulacro yo la enchegara; a partir de ahí el asalto sónico de la grabación  de Un Chien Catalan que se desprendía de la altísima potencia de los altavoces era catártica, quedando anulada cualquier reacción adversa del publico asistente que por otra parte no hubo, todo ello con unas imágenes de fondo en que mostraban diferentes fotos de viajes de Eliseu con su moto, sin duda una experiencia única.

Aprovecho esta entrada para comentar otro grato recuerdo de Eliseu que casi aparece calcado en la primera secuencia en que aparece como Drácula en la película de Albert Serra Història de la Meva Mort, en ella se le ve en medio de la noche al borde de un río escuchando hipnotizado el ruido de las ranas y las alimañas del bosque, me quedo admirado viendo le secuencia pues semejante ambiente lo viví junto a él y una amiga de Girona en las afueras de esa ciudad la noche que pasaba el cometa Halley el mismo año de la edición de Un Chien Catalan, a la vuelta las eruditas charlas de pasiones suyas que te llevaban de Grateful Dead a Whitehouse, una noche estelar.

 Interior de Un Chien Catalan precedido por su portada, todo grafismo de Marc Valls.


    Jordi Valls, Eliseu Huertas y William Bennett en el Macba de Barcelona.

    Cartel de Eliseu para una serie de conciertos de Whitehouse.

      Eliseu en un poster de Història de la Meva Mort de Albert Serra.



Chant Deuxième by Vagina Dentata Organ on Grooveshark

lunes, 17 de febrero de 2014

WTC- 9/11 El sonido de los edificios murmurando



"Hermano. Antes de continuar debes hacer lo que te pido. Si fallas, habrás perdido toda opurtunidad de alcanzar el verdadero conocimiento. Si sigues mis instrucciones, ganarás el mundo. La decisión es tuya. Pero mira dentro de tí, hermano y descubrirás que no hay alternativa en absoluto.
Deja el libro. Cierra los ojos. Espera en silencio. Escucha. ¿Qué es ese sonido más allá del silencio? ¿Lo oyes? ¿Puedes oir el zumbido? ¿No? Escucha otra vez. Escucha hasta que lo oigas.
Allí
Lo oyes
Es el zumbido
Lo ignoras durante toda tu vida.
Las almas falsas de este mundo lo llaman red eléctrica, una onda entre cincuenta y sesenta hercios de corriente que recorre tu casa. La suya es la gran mentira, una decepción sionista. El zumbido puede percibirse en aldeas sirias y en Khalden, lejos del resplandor de los focos. Puedes oírlo con tu cuello bajo la bota del Gran Satán. Y en Alemania, en Praga, en España y, sí, incluso en mi natal Masr, mi Egipto.
Este no es el ruido de la electricidad .
Este es el sonido de los edificios murmurando."

El escrito corresponde a un extracto del libro Atta de Jarett Kobek publicado originalmente por Semiotexte y en nuestro país por Alpha Decay, una biografía alucinada de Mohamed Atta en que planea la idea de que el 11 S bien pudo ser un acto de crítica arquitectónica más que un acto de terrorismo religioso. Al Atta arquitecto le repele la arquitectura infiel occidental y durante partes del libro percibe que los edificios le emiten perturbantes zumbidos. Dos años antes del atentado, el músico electrónico Stephen Vitiello captó quien sabe si estos mismos zumbidos o vibraciones en el piso 91 del World Trade Center a base de unos micrófonos de contacto como también transfirió las luces de alrededor convirtiéndose en sonido a través de unas células fotovoltaicas. Estas grabaciones serían posteriormente integradas en su disco Bright and dusty things.

Fueron muchos los músicos del área de Manhattan que de diferente manera se vieron afectados el 9/11, uno de los más destacados fue el caso de William Basinski que ese mismo día terminaba de digitalizar sus antiguas cintas magnetofónicas, el momento de oirlas coincidió con el atentado y las fotos que tomó  de la zona sirvieron como portada a estas grabaciones en su disco The Desintegration Loops, posteriormente ha servido como base para algún concierto de conmemoración como también lo fue la obra de Steve Reich WTC 9-11,  compuesta para el Kronos Quartet  comenzó con una gran polémica por la foto de uno de los aviones estrellándose en el edificio que mucha gente consideró como una explotación del acontecimiento, teniendo al final el sello Nonesuch que cambiarlas por otra.

Pero ninguna polémica destacó tanto como las declaraciones que cinco días después efectuó Karlheinz Stockhausen en una conferencia tras su serie de conciertos Licht, en las que manifestó que los ataques a las torres gemelas habían sido el mayor trabajo artístico de todo el cosmos. Otro artista alemán, Gerhard Richter, dejó su impronta sobre el acontecimiento a través del cuadro September (al principio de esta entrada) en que refleja la vivencia de haber volado ese mismo día a New York teniendo que ser desviado su vuelo a Halifax en vista de o lo que estaba ocurriendo.

Cinco días después en un concierto de Laurie Anderson en New York la ejecución de Oh Superman adquiría un escalofriante ambiente al cantar por el vocoder esta estrofa premonitoria: "Here comomes the planes/ they're American planes made in America".

                                        Stephen Vitiello. World Trace Center, Floor 91. 1999

                                            William Basinski. The Desintegration Loops



Light Readings by Stephen Vitiello on Grooveshark

martes, 4 de febrero de 2014

RAFAEL FLORES El Sopor Video


Cuando creamos Ortega y Cassette en 1982, uno de nuestros primeros contactos fue Rafael Flores cuyos envíos desde su editora El Consumo del Miedo estaban repletos de una imaginaría de collages visuales realmentes impactantes que complementaban perfectamente los sonidos que el registraba bajo el nombre de Comando Bruno con técnicas de música concreta, "field recordings" y toques de onda corta, toda una mezcla de perturbadora poética desde su refugio en el pueblo jiennense de Andújar donde sus sonidos podrían ser las tinieblas de los silbidos de Kurt Savoy, otro oriundo del lugar.

A pesar de que Rafael Flores ha confesado que gran parte de su producción la ha hecho solo por entretenimiento, su obra es capital dentro de lo que se ha llamado International Cassete Network, siendo editados sus trabajos con editoras como Graf Haufen Tapes, Korm Plastics, Discos Esplendor Geométrico o Monochrome Vision, de este último concretamente en 2005 el cd Nubes, Cometas, Rumores y Orugas en lo que significaba de alguna manera su vuelta tras una década de menor actividad musical, más centrada en sus trabajos de  creación de video agrupados bajo el nombre de El Sopor, una actividad menos conocida que su faceta musical, algunas de los cuáles os presento a continuación.

 
  MAN IMITATING CLOUD. Extracto del film de 8 horas con música del propio Rafael Flores. 2002


DEEP + EXTRA DEEP. 2011


Video realizado por Rafael Flores para el tema Neuridina de Esplendor Geométrico incluído en la cassette EG-1, el espíritu de Pan Sonic una década antes.

Como cierre me gustaría también añadir Terminal del director neoyorkino Joe Felong, en este caso es la música la que corresponde a Rafael Flores.