Vacuola es la colaboración entre dos viejos amigos. Unos pocos conceptos sobre el espíritu y carácter del trabajo bastaron, junto a la certeza de lo que no querían hacer, y el gusto por los temas cortos. Ante estas premisas, el CD se desarrolló en el tiempo retroalimentando los inputs que uno recibía del otro en forma de tracks que iban cobrando forma. La poética de los temas transcurre entre la vida previa a la muerte, las lúdicas experiencias inexplicables y los universos que nos rodean. Vacuola es un compendio de sensaciones a veces violentas y otras esperanzadoras que no deja de responder a un permanente estado de ánimo y a una ingenua rebelión contra nuestra condición de humanos.
Al texto anterior de Ángel Lalinde que ha servido de presentación del cd que hemos compartido en su realización con el nombre de Vacuola poco podría añadir. Define muy bien las sinergias que originaron los doce temas de este trabajo, una osmosis de música quebrada y reposo ascético, de pasmo y plenitud con una aura poética con la me identifiqué totalmente con él a raíz de su exposición Memoria (2007) en El Masnou y su posterior libro Memoria Salada, editado por S.T.I., que contiene tanto poemas como composiciones visuales entre las que se encontraba la que utilicé para mi trabajo Quebrantos. Antes ya había ilustrado Hydro Parhelia y más recientemente Jardín Náufrago. En Vacuola las imágenes envejecidas y cerosas previas que sugería para ilustrar el disco volvían a ser altamente inspiradoras, su degradación química lindaba con unas modulaciones y tonalidades que iban surgiendo con espíritu de estupefacción y añoranza.
Añoranza en el umbral de la temprana infancia, como refleja al abrirlo el interior del cd con nuestras fotos y transitando en el tiempo, añoranza de nuestros lejanos días de encuentro como el tema Comalada, nombre de la calle donde vivían Ángel y María Dolores García, allí hacia 1981 matábamos el tiempo escuchando electrónica, pop, free jazz radical, excentricidades alemanas y las primeras grabaciones de nuestros proyectos que unidas a las de otra gente cercana nos llevó a inmiscuirnos en los circuitos de música industrial y experimental con el nombre de Ortega y Cassette. Uno de esos primeros contactos fue Rafael Flores con su sello el Consumo del Miedo, un capricho del tiempo ha querido que cuarenta años después Vacuola haya recalado en Wet Dreams Records el sello que codirige junto a Josep María Soler, rescatador incansable de estas escenas; sin duda este hecho nos estimuló mucho en el desarrollo de este cd que ha sido masterizado por Carlos Dal Verme y que ahora presentamos.
Imágenes de Ángel Lalinde simultáneas a Vacuola Ángel Lalinde Laite. Memoria Salada. STI Ediciones 2010