martes, 7 de abril de 2020

Velando a Víctor Nubla




Quería escribir todo esto la misma noche de su fallecimiento el pasado 31 de marzo pero no podía, sentía un enorme pesar aún sabiendo de su previa hospitalización e irremediablemente me refugiaba en el recuerdo de mi último encuentro con él en su casa hace apenas dos meses donde quedamos para comer y de paso intercambiarnos material, hace tiempo que no lo hacíamos y en esta ocasión tenía muchas ganas de ver el reportaje y entrevista que de su trayectoria había efectuado la publicación británica The Sound Projector con que quince páginas de extensión, nada de extrañar habida cuenta de una larga trayectoria que empieza con la creación de Macromassa en 1976 y toda su producción en solitario con innumerables registros en diferentes formatos, bandas sonoras, instalaciones, música para bandas y orquestas, talleres, acuarelas y una cada vez mayor labor literaria a través de artículos de prensa y libros de contenidos variadísimos.

Conocí directamente a Víctor en 1978 cuando nos traía a la tienda de discos de Gay&Co  de la calle Hospital el primer single de Macromassa Darlia Microtónica, se compraron muchos de ellos pese a la radicalidad sonora de "free electronics" muy cercana a la música industrial. La escucha del disco en la tienda esa misma tarde y luego en mi casa me impactó mucho y me maldecía de no haberlos visto pocos meses antes en conciertos como el que dió lugar al single en la Sala Màgic del que me hablaba como asistente Silvia Escario cantante de Ultimo Resorte o uno en el Colegio Martí-Codolar en mi barrio de Horta, zona donde también estuvieron durante un tiempo ensayando. En esos días sí coincidimos en el concierto en el Casal Claret de Henry Cow de cuyo sello inmediato Recommended Records empezarían pronto a distribuir algunos de sus discos en la tienda así como de contactos franceses especialmente el disco de Heratius Corporation, todo este material de intercambio, que se vio acentuado por nuestra presencia en la revista norteamericana Eurock lo escuchábamos en casa de Juan Crek y Fina con discos de The Residents o Magma entre otros y junto a los primeros ejemplares del Periódicodeunasolahoja.

Todo este intercambio internacional de material se incrementó aún más nada más empezar los ochenta con la llamada cassette network, donde Víctor recaló en paralelo a la experiencia de autoedición discográfica que era UMYU, con las dos cassettes del duo Secreto Metro junto a Peque Lino cuyo piso en un edificio altísimo de La Guineueta con unas fantásticas vistas a Collserola servía de estudio, así lo reflejó en una fotografía la revista musical Sounds dentro de varios reportajes dedicados a este tipo de agrupaciones y sellos, que lástima que no encuentre ninguna foto del mono naranja que llevaba en aquellos tiempos. Todo este fluido de material en forma de cassette originó en su caso la creación de LMD (Laboratorio de Musica Desconocida) junto a Juan Crek y Katy Phipps, Antón Ignorant con 1984 Cintas y Ortega y Cassette por nuestra parte. Ante esto Víctor decidió unir fuerzas y coordinarnos en una posible sociedad cultural llamada Centro de Documentación Leticia Vinaroz donde se pudiera recopilar, clasificar y conservar todo este material proporcionando intercambio y acceso, un ambicioso proyecto llevado a instituciones culturales de la Generalitat cuya respuesta fue de escasa receptibilidad. En este proyecto también estaba Radio PICA donde todos participábamos en diferentes programas por separado y ocasionalmente en uno conjunto llamado Informe Semanal donde aprovechando una accidentada visita de La Edad De Oro en Barcelona a la Sala Metro aprovechamos para acercar el micrófono a su directora Paloma Chamorro en una entrevista delirante de la que sin embargo originó futuras colaboraciones como fué la presentación de Víctor  en un programa de varios videos de Ralph Records.

Otro escenario de mis encuentros con Víctor se sitúa en su piso de la calle Tordera en la emblemática Plaza Raspall del barrio de Gracia, tras picar al timbre venía a recibirte vigorosa su perra Hortensia, allí te podías encontrar a Paloma y Lulu de Maton Kiki, Jean Marc Vivenza o Eric y Marc Hurtado de Etant Donnes. También podíamos quedar en el bar de enfrente, su adorado Resolís y presentarle a Arturo Lanz de Esplendor Geométrico y Andrés Noarbe, de este encuentro surgirían nuevas grabaciones de él en el sello EGK y ya posteriormente dos discos de Macromassa. Por allí se podían ver también los miembros del grupo británico Murphy Federation cuya furgoneta se había estropeado enfrente a la Sala Orquídea a muy poca distancia de allí, todos ellos participarían en la recopilación que Víctor estaba preparando con el título de Domestic Sampler en los estudios Soni Tec de la calle Gomis, allí pocos meses antes se había gestado el single de Lol Coxhill tras haber tocado en directo con Nubla y Cludio Zulián en el Piano Bar. Como se puede apreciar una frenética actividad, toca volver a casa y leer Historia abreviada de la literatura portátil comprado en la librería Cap i Cua y si el sueño no le vence seguir escribiendo sobre toda la evolución musical del siglo XX, un libro que finalmente se público como La Nueva Música con el seudónimo de Adolfo Marín.

Llega la fiebre olímpica que contagia gran parte del tejido creativo de la ciudad y en el Mercat de las Flors me quedo contrariado que tras la actuación de Gringos Víctor se quede sin ver a The Work la nueva formación de su admirado Tim Hodgkinson atendiendo un trajín de encuentros con dinamizadores culturales en el bar del teatro, me pregunto si sabe donde se ha metido teniendo que asistir en ocasiones a un frío módulo de la torre Mapfre. Esta actividad de gestión es reconducida afortunadamente a la creación del Festival LEM con Gracia Territori Sonor como organización, un festival que crece cada año exponencialmente en participantes de gran interés pero que lamentablemente tiene que convivir con el parón de varios años de Macromassa tras su actuación en la Plaza de Toros de Algeciras junto a Masters of Jajouka y Muslimgauze.

Nunca le agradeceré bastante la invitación que tuve por su parte y Io Casino de pasar un fin de semana junto a ellos en la residencia de artistas Côclea en Camallera en el Baix Empordà después de la muerte de mi padre, allí cocinaron pescado de L'Escala y por la tarde acudimos a la playa del Muelle de Empúries en el atardecer, toda esta zona tendrá un gran influjo en varios cds suyos como Empúries y Seven Harbour Scenes con imágenes del Port de la Selva. Música hecha con una instrumentación mínima como un teclado casio Sk1, onda corta, un multitrack de cuatro pistas y una misteriosa cajita de sonidos inciertos que bautizó como La máquina de hablar con Dios, todo ello lo podía transportar con facilidad a lugares donde se retiraba como el Hotel Riomar en Sant Martí de Empúries o muy especialmente el Hostal La Gambina en Colera donde de nuevo tuve el privilegio de compartir dos días con él y Alain Wergifosse charlando con el fondo del sonido nocturno del mar frente a dos pequeñas playas continuas de nombres expresivos, Les Portes y Els Morts. El norte de Girona tenía una línea continua de filósofos cuánticos trazada por Salvador Francesch, Eliseu Huertas, Jordi Valls y este enclave con Víctor Nubla.

Tras el letargo Macromassa con algún contratiempo de salud vuelven a despegar las alas a través de canales de amigos como un concierto en una fiesta en Radio PICA, la sala Heliogàbal o en la galería Eat Meat donde presentan su cd Armas Mosca editado por La Olla Express recuperando su instrumentación original:Víctor Nubla clarinete modificado y Juan Crek audiogenerador y voz. Coincidiendo con este regreso de nuevo una considerable labor literaria con varios de sus libros editados por Males Herbes, charlas literarias e incluso como selector musical en vermouths en el Bar La Sínia, no puedo asistir a muchas de ellas pero no me pierdo la reveladora y divertida conferencia La Pistolas de los Rayos sobre su admirado Philip K Dick, allí nos emplazamos para encontrarnos en la Bodega La Palma para volvernos a intercambiar material donde me pregunta perplejo si me ocurre como a él que en varias copias del disco Macromissa editado veinte años antes estaban despareciendo los títulos del disco impresos en letra de oro.

Como he mencionado al principio, el pasado febrero quedamos para comer en su piso de Mila i Fontanals, le espero en la puerta y le veo con mucha mejor movilidad que por ejemplo la última vez que le acompañé a este punto tras un emocionado encuentro propiciado por Eli Gras con Archie Patterson el editor de Eurock a quien no conocíamos personalmente. Ya en casa me pone al día de trabajos que no conocía como el disco Les trois machines de l'apocalypse compartido con Lieutenant Caramel y Pacific 231. Comentamos el reciente concierto de Macromassa en el sorprendente escenario modernista de la Capella del Col-legi Major Ramon Llull con una gran audiencia ya generacionalmente más joven ávida de referencias y que podrán disfrutar de su música a través de Hrönir Radio, un portal que emite 24 horas seguidas de manera aleatoria tanto material en solitario de él como de todas sus formaciones, sin duda una gran idea. Es hora de marcharme me anima que me quede a conocer a un chico muy interesante, algo cada vez más raro para él de encontrar en un barrio de Gracia cada vez más hipsterizado, avanzamos por el pasillo repleto de cassettes, acuarelas y libros alguno de los cuales me muestra con ilusión, ya en la puerta nos damos un abrazo de despedida como siempre y me invita a que tengamos más veladas como esta. Lamentablemente esto último no podrá repetirse, no me hago la idea de su pérdida y en estos días de aislamiento desconsuela no poder abrazar a compañías de viaje como Katy Phipps, Io Casino o Juan Crek. Repaso de nuevo el material que me dió ese día, el número de The Sound Projector y un librito que acaba de salir de imprenta editado por Marc Valls en Edicions Roure con el título De lo que no trata este libro (Técnicamente estoy aquí) en cuya última página Víctor nos escribe:

"Fisuras de miedo, impactos de soledad, oscuridades de silencio. Nada de eso es bienvenido, Todo era más sencillo, mi dar era completo, no pedía nada a cambio, por eso veo; por eso comprendo. Tendrán que inventarme de nuevo. Si es que los fantasmas pueden inventar seres no muertos, aunque sea para volver a comérselos."


                                                                    Macromassa 1978



Adelanto en forma de regalo de Varios Temas Populares (1978) y De Monios SL (1979)

                                                Edición limitada de Quantos/ Represalia


                                            Peque Lino y Victor Nubla como Secreto Metro

   Ángel Lalinde, Javier Hernando y Víctor Nubla observados por Hortensia

Víctor Nubla y Paloma Chamorro presentando vídeos de Ralph Records, La Edad de Oro 1983

Piedra Nombre, primer cd de la serie MCO, como toda su producción se puede oir en este bandcamp


Últimos dos cds de la serie MCO grabados con su unidad portátil y publicados en Hrönir

                                  Macromassa 1989 (Ignorant, Nubla, Crek), foto Albert Ramis


  Macromassa maniobrando el audiogenerador Duy en el Heliogàbal, 2012



         Concierto de Macromassa en el Festival Lem. Capella Ramon Llull 5-10-2019
                                 
                   

Programa radiofónico realizado por Ed Pinset en Resonance FM dedicado a Víctor Nubla

martes, 31 de marzo de 2020

Voltajes oscilantes, Experimental Intermedia NYC- Screen Compositions

                                 Barbara Held & Benton C Bainbridge -Tearing through

Una de las consecuencias que vamos a padecer estos días a consecuencia del trágico virus es la suspensión o aplazamiento de conciertos o ediciones a fechas inciertas, todo ello se ve acentuado en un terreno tan frágil como es el mundo de la experimentación musical, dicho esto con toda la relatividad del mundo comparado con la pérdida de vidas humanas. Uno de estos aplazamientos es el concierto que durante este mes iba a dar Phil Niblock en la añorada sala Metrònom de Barcelona y supongo también que el de la Caja Negra-C3A en Córdoba donde también estaban programados Limpe Fuchs y Eduardo Polonio coincidiendo con la gran restrospectiva de Pauline Oliveros. Esta suspensión del concierto barcelonés coincide con el paro absoluto del Experimental Intermedia de New York, el espacio creado por Niblock en 1973 centrado en actuaciones interactivas y en la edición musical a través del sello XI Records.

A través de Barbara Held, pocos días antes de este padecimiento, Experimental Intermedia NYC nos anuncia la edición número 16 de Screen Compositions, una colección de procesos generativos con intersecciones de imágenes alteradas y sonido a través de colaboraciones de videoartistas y músicos, todo ello coordinado por Katherine Liberovskaya. Viendo todos ellos me llama poderosamente la atención todos los que están originados con sintetizador de video, procesos caóticos de distorsión de imágenes cuyo origen hay que buscarlos en procesadores que aparecieron en la mitad de los setenta con nombres tan cibernéticos como EMS Spectron o Chromaton 14.



                                                                        EMS Spectron


Barbara Held & Benton C. Bainbridge: Arriba, Instalación audiovisual generativa en la exposición El Giro Notacional (Musac Leon-2019)

viernes, 20 de marzo de 2020

Unidos en nuestra reclusión, Throbbing Gristle United




Otra triste pérdida, hace pocos días nos dejó Genesis P- Orridge, su fallecimiento se produce en medio de los días convulsos que estamos atravesando por el virus, un escenario catastrófico que nos parece irreal y que solo habíamos imaginado en recreaciones de creadores de mundos terminales como fue el caso de su grupo Throbbing Gristle, ellos nos mostraron parecidos escenarios asociados a las tácticas de desinformación y supervivencia desde una ciudad como es Londres, donde estos días sus ciudadanos asisten atónitos a los planes gubernamentales de contingencia del virus basados en una aventurada inmunidad de grupo cuya inacción pone en peligro la población con menos recursos y enfermos mayores, nada sorprendente en una ciudad que como James Bridle apunta en su libro The New Dark Age, Technology and the End of the Future cuenta con un hospital en Hillingdon, supuestamente modélico, cuyo terrado cuenta con antenas parabólicas de microondas para acelerar transacciones bursátiles ultrarápidas.

Como ocurría con la Velvet Underground que eran capaces de componer en un mismo disco Sunday Morning y Black Angel's Death Song, Throbbing Gristle tenian la capacidad de alterarte en la oscuridad y relajarte en la esperanza como prueba su primer single United/Zyklon B Zombie publicado en 1978, su portada tiene semejanza con lo que estamos viviendo estos días, en la parte frontal una serie de garajes todos cerrados en un entorno sin gente y en la contraportada Chris Carter bañándose como desinfección. United es una canción de amor, no de pareja sino universal, Genesis P-Orridge dijo en una ocasión que pretendía ser como una voz de ánimo que te encuentras vía telefónica para mitigar el distanciamiento de amigos y seres queridos, su voz parece un mantra flanqueado por una línea melódica y pulsion rítmica tajante de sintetizador ejercida por Chris Carter, una fórmula que se repetiría en sus otros dos singles posteriores presentados todos de forma uniforme y con bolsas de camuflaje, producto artístico pero también información al igual que toda la la serie de cassettes parejos de sus conciertos. El single tuvo un gran número de ventas proviniendo de un sello independiente, fue elegido como single de la semana por NME y coincidió con otros lanzamientos de pop electrónico como el Being Boiled de The Human League cuya cara B también tenía un reverso inquietante como era Circus of Death.

En medio de la inquietud de la ciudad británica por el coronavirus, ayer aparecía un desinfectante de manos creado por la cervecera BrewDog que han bautizado asombrosamente como Punk y que se va a distribuir gratuitamente a toda la gente que lo necesite, ninguno de los creadores de la escena punk o industrial se podrían imaginar nada semejante en sus temas más aguerridos de resistencia.

"United/its a lie/its the same/it's a sigh/It's a game/Its the way/ Its the where and the when we're united". Cuidaros mucho, un abrazo.




                                      Throbbing Gristle, Genesis P. Orridge y Chris Carter

Cartel del concierto de Throbbing Gristle en el London Film Makers Co op previo al single



                                              Entorno del Hillingdon Hospital en Londres

                                                                  Desinfectante Punk



martes, 10 de marzo de 2020

Max Ernst, fantaseando su colección de discos




Cualquiera que recorra la exposición sobre Surrealismo y Diseño en el Caixaforum podrá observar en muchas de sus fotos como se apilaban montones de objetos en muchas de sus casas o talleres, algo un tanto paradójico en un movimiento que plasticamente mostraba la fantasmagoría del vacío. En una de esas fotos encontramos a Max Ernst reposando en la casa de Peggy Guggenheim en New York, el ámbito no es muy distinto a varias fotos que siempre hemos visto al hogar de André Breton repleto de objetos exóticos, pero llama poderosamente la atención un enorme tocadiscos con su su altavoz en forma de cuerno  que seguramente no encontrariámos en casa del escritor francés, habida cuenta de su proverbial indiferencia al mundo musical en que alegaba la preferencia del silencio a la música para la contemplación de la cosmogonía poética de la obra surrealista.

A excepción de Erik Satie, de los pocos músicos que tuvieron relación con artistas surrealistas podemos encontrarlos en Estados Unidos como es el caso de Edgar Varèse con obras como Arcana inspiradas por elmundo de los sueños y muy especialmente George Antheil quien compuso obras basadas en los collages de Max Ernst, ambos participaban en un círculo social neoyorkino con figuras locales como Maya Deren y Dylan Thomas que alternaban con artistas europeos expatriados durante la Segunda Guerra Mundial entre los que se encontraba el propio Breton quien escribió en esos días: "Entonces que la noche siga cayendo sobre la orquesta, y que yo, que todavía estoy buscando algo del mundo, quede en mi contemplación silenciosa, con los ojos abiertos o cerrados en generar luz". 

Pese a esta indiferencia al mundo de la música seguida por el surrealismo más ortodoxo y pese a las semejanzas entre el automatismo y la improvisación me he aventurado a imaginarme discos de acompañamiento a las ensoñaciones vegetales y minerales de Max Ernst, así que como decía Gómez de la Serna dejemos que el tocadiscos respire al aire.






























miércoles, 26 de febrero de 2020

Hollywood Dark Ambient




Todos los que de alguna manera hacemos música electrónica o experimental al mostrarla a un público no familiarizado con este tipo de géneros hemos oído en muchas ocasiones que les parecía ideal para una película de misterio o de terror cuando no de extraterrestres, es una apreciación tan válida como cualquier otra en tanto que por ejemplo en un sector mucho más ilustrado como es la critica musical en los últimos años se califican muchos de estos trabajos como ideales para una película imaginaria. La inclusión de este tipo de música ha sido evidentemente más frecuente en el cine experimental que en el comercial algo que sin embargo ha empezado a cambiar estos último años donde diferentes directores cinematográficos han considerado la creación de las bandas sonoras o diseño de sonido de una manera más innovadora, implicándose con el propio músico para que las bandas sonoras no sean solo un relleno de postproducción, esta corriente marca contenidos aun dentro del terreno mas comercial de un cine más moderno.

Un primer síntoma de esto lo encontramos en 1989, los premios AACTA otorgados por la Australian Film Industry otorgan el premio a la mejor banda sonora a Graeme Revell por su trabajo en Calma Total apenas dos años después que gran parte de esta ya apareciera en su disco In Fragante Delicto como SPK editada por el sello industrial Side Effects dirigido por entonces por Brian Williams de Lustmord quien colaboró en el diseño sonoro. Es de destacar que justo dos años antes Paul Schutze miembro de otro grupo industrial australiano como era Laughing Hands obtuvo el mismo galardón por la película The Tale of Ruby Rose. El estrecho contacto del cine australiano con Hollywood facilitó el traslado de Graeme Revell y Brian Williams uno de los primeros músicos en que se le calificó el término de dark ambient, lo cual no le impedía tomarse una cerveza con Angelina Jollie o un coctel con Burt Bacharach, el glamour californiano conviviendo con la central eléctrica abandonada.

Toda esta audacia de producciones cinematográficas con bandas sonoras de oscuras atmósferas tiene en Jóhann Jóhannson un elemento fundamental a través de sus trabajos con el director Dennis Villenueve (Prisioners, Sicarios, Arrival). Teniendo formación como pianista, sus composiciones tanto albergan la utilización de orquesta con toques de música espectral, como la utilización de crear sonidos ya sea por medios analógicos, electrónicos o digitales, resonancias majestuosas y texturas subsónicas de una belleza inquietante que le vincula a su Islandia natal lugar también de nacimiento de Hildur Guönadóttir colaboradora de él y con parecidos planteamientos, esta vez tomando como instrumento de origen el violonchelo del que obtiene muestras alteradas y deformadas buscando siempre un enfoque equilibrado entre lo lúdico y experimental como muestra  recientemente Joker galardonada con el Óscar, trabajo que simultaneó con la serie Chernobyl donde también añadió grabaciones de campo en una central eléctrica abandonada ayudada por Chris Watson con quien ya había colaborado años antes así como en la segunda reencarnación de Throbbing Gristle.

No siempre la relación de estos músicos con los directores ha sido tan fluida como por ejemplo ocurrió con la banda sonora original que Coil hicieron para la película Hellraiser rechazada a última hora por no ser suficientemente sinfónica, en parecidas circunstancias se encontró Jóhann Jóhansson mientras componía los temas de Blade Runner 2049 apartados del montaje final del film ante su rechazo de no seguir un estilo más Vangelis responsable de la versión orinal de la película. Otro remake de un clásico de la ciencia ficción como es Solaris contó con la autoría sonora de Cliff Martinez, músico proveniente de la escena punk californiana. La industria cinematográfica norteamericana no tenía reparos en acudir a estos músicos después de que Trent Reznor alterase su experiencia en Nine Inch Nails al celuloide siendo incluso oscarizado por La Red Social. En este listado resumido al menos mencionar músicos con orígenes en la música contemporánea o minimalista como Max Richter, Mica Levi el propio Javier Naverrete que vive en Los Angeles y no me extrañaría en poco tiempo la presencia de la portuguesa Andreia Pinto Correia después de haber visto el otro día la extraordinaria Extinçao dirigida por Salomé Lamas.





Recreación sonora del film Stalker a cargo de Robert Rich y Brian Lustmord ambos colaboradores de Graeme Revell y todos ellos apasionados de Andréi Tarkovski.

                                                 Jóhann Jóhansson y Hildur Guönadóttir

Jóhann Jóhansson el el Auditori de Barcelona en febrero 2018, su última aparición pública diez días antes de su repentino fallecimiento en Berlín (fotografía de el Periódico).

                                               Max Richter en un concierto en Los Angeles

 Mica Levi en estudio y debajo una muestra de su banda sonora para Under the Skin







Brian Lustmord, extracto de la banda sonora First Reformed dirigida por Paul Schrader



Banda sonora de la serie Chernobyl compuesta por Hildur Guönadóttir

miércoles, 12 de febrero de 2020

Error y mal funcionamiento instrumental



Casi coincidiendo con los 20 años de su existencia Hazard Records ha publicado una grabación de Demo titulada My Broken Juno (Lazy Sound Project II), nada menos que su referencia número 95 del sello que dirige Anki Toner a la que hay que añadir ayer mismo su último lanzamiento de Carter Piler y Sedcontra recuperando una sesión de ensayo de 1997 en su otro sello de reediciones 16RPM. Los temas de Demo están extraídos de grabaciones del Roland Juno 106, uno de los sintetizadores polifónicos más significativos de los ochenta, utilizados por grupos como Cabaret Voltaire o posteriormente Autechre, que sin embargo presentaron un problema bastante común en su uso como era el fallo de los chips de voz en que unos de los seis disponibles se vuelven "muertos" o agrietados, una contrariedad que hizo a muchos deshacerse de él, no así ha sido el caso de Raimon Aymerich antiguo componente de Superelvis que antes de repararlo decidió grabar su mal funcionamiento a través de su sonido ruidoso y distorsionado, de las cuatro piezas dos suenan solas y las otras están ligeramente manipuladas.

El error y el mal funcionamiento instrumental han sido determinantes en la invención de nuevas nuevas técnicas compositivas sobretodo en el hardware digital de los noventa llegando incluso a generar un estilo como ha sido el glitch y la aparición de sellos como Mille Plateaux o Mego, también por aquí esta impronta la podemos encontrar muy poco después en editoras como la propia Hazard Records o Alku y en esos mismos días yo mismo decidí grabar varios temas de oscilación chirriante surgidos de mi dat estropeado y abandonado tras dos carísimas reparaciones, uno de ellos Rastrales al masterizarse para la primera recopilación en cd de Self llevó a la duda a lo técnicos de si el sonido era así originalmente. Toda esta aleatoriedad sónica llegó incluso a bautizar en la Sala Game B de la Barceloneta las sesiones sabatinas del Error Club.

Este gusto por el encuentro con el error imprevisto sigue en la actualidad con plataformas como la holandesa Error Instruments donde se pueden encargar singularísimos artefactos de composición algorítmica o Sample Radar que entre sus muchos productos se encuentran muestras de sintetizadores que funcionan mal. Como bien apuntaba Marshall Mcluhan "Primero damos forma a nuestras herramientas y luego nuestras herramientas nos dan forma".


                   Un testimonio de mal funcionamiento del Roland Juno 60, precedente del 106

                Sample Radar y su acceso a muestras de sintatizadores con mal funcionamiento

                                                                    Error Instruments


  Ensayo sobre "sound malfunction" con portada referencial a Oval y Yasunao Tone


Video clip del tema A Single Minute del tercer disco de Superelvis Wrong Songs en los que apaecen Anki Toner, Mateo Giráldez, Oriol Perucho, Tres y Raimon Aymerich tocando el Roland Juno 106